Aunque el conflicto geopolítico entre Rusia y Ucrania entra en su cuarta semana, el diálogo sigue estando sobre la mesa. Al punto que se tiene previsto que las delegaciones de ambas partes reanuden las conversaciones en línea este lunes 21 de marzo.
Un escenario latente, pero que se encuentra con nuevos elementos discordantes, como la negativa de Kiev de rechazar el lunes el ultimátum ruso de entregar la asediada ciudad de Mariúpol.
En tanto, Rusia asegura que «no hay suficientes avances» en las conversaciones con Ucrania como para considerar una reunión cara a cara entre los presidentes Vladimir Putin y Volodímir Zelenski, tal y como ha pedido este último durante los últimos días.
«Para hablar de una reunión entre los presidentes, primero hay que hacer los deberes y lograr un acuerdo sobre los resultados de las negociaciones«, ha señalado el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov.
Por su parte, el medio ucraniano Ukrainiskaya Pravda, destaca que el presidente Volodímir Zelenski precisa que Israel es un agente determinante para las conversaciones.
Incluso se atrevió a señalar que Jerusalén es el lugar adecuado para las conversaciones entre Ucrania y Rusia.
«El Primer Ministro de Israel, el Sr. Bennett (Naftali Bennett), está tratando de encontrar una manera de negociar con Rusia. Y estamos agradecidos por eso, por cada esfuerzo para iniciar conversaciones con Rusia tarde o temprano. Tal vez podrían tener lugar en Jerusalén. Este es el lugar adecuado para encontrar la paz. Si es posible», destaca Zelenski, según Ukrainiskaya Pravda.
A su vez, Zelenski instó a Europa a aumentar significativamente la presión sobre Moscú para que detenga la operación militar que empezó el 24 de febrero, y dijo que el continente debe cesar cualquier tipo de comercio con Rusia.
Incluso presiona para que Kiev sea admitido cuanto antes a la OTAN.
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