Shanghái aguanta este miércoles algunas de las temperaturas más altas jamás registradas en medio de una ola de calor que agobia a China y que activó una serie de alertas y que amenaza la agricultura y el sector energético.
Esta semana varias regiones del hemisferio norte han sido azotadas por temperaturas extremadamente altas, con una ola que golpeó duramente primero a Portugal y España, y ahora se cierne sobre Francia y el Reino Unido.
China también ha sufrido fenómenos climáticos extremos este verano y en junio unas lluvias torrenciales no vistas en décadas obligaron a cientos de miles de personas a dejar sus hogares. Al mismo tiempo en otras regiones se ha registrado un calor sofocante.
Los científicos afirman que las olas de calor se van a hacer más frecuentes por el cambio climático y probablemente serán más prolongadas y más intensas a medida que las temperaturas globales comiencen a subir.
El miércoles la estación meteorológica central de Shanghái registró 40,9 ºC hacia las 14H30 hora local, informó el portal de la Agencia Nacional de Meteorología.
Estas cifras “corresponden a los récord de temperatura del aire más alta en esta área desde que comenzaron los registros en 1873”, señaló.
En las redes sociales los habitantes de la ciudad comentaron el intenso calor y un usuario en Weibo señaló que cuando fue a hacerse una prueba de COVID se sintió como “carne en una barbacoa”.
“Quizás esto queme todo el virus”, señaló otro.
En las redes sociales, las fotos mostraban a los trabajadores sanitarios que realizan los hisopados trabajando sentados en placas de hielo.
La ola al este y el sudeste de China y este miércoles las autoridades advirtieron que las temperaturas pueden alcanzar los 42ºC en algunas aéreas.
Algunos medios reportaron muertes vinculadas a la ola de calor.
CACTUS24/RDN